Helado de sésamo

El Helado de sésamo es una receta que será un regalo refrescante para los amantes de esta semilla. A nosotros nos encanta en todo tipo de platos, recién tostada ofrece un aroma y un sabor penetrante que conquista. Hace tiempo os mostramos la receta del crocante de sésamo, y es a partir de esta elaboración de la que hacemos el delicioso Helado de sésamo.

En base a esta receta, os mostraremos otros helados que tienen a estas nutritivas semillas de sésamo entre sus ingredientes, también un llamativo helado de semillas de sésamo negro. Pero de momento os recomendamos que probéis este helado y esperamos que os guste tanto como a nosotros.

Ingredientes

Para el sésamo caramelizado

• 70 gramos de semillas de sésamo crudas
• 130 gramos de azúcar.

Para la crema

• 300 gramos de leche
• 3 yemas de huevo
• 50 gramos de azúcar invertido
• unas gotas de esencia de vainilla (opcional).

Elaboración

Tuesta las semillas de sésamo a fuego lento en una sartén antiadherente, muévelas a menudo para que se tuesten uniformemente, verás que saltan como las palomitas de maíz, desprenden un aroma buenísimo y van adoptando un color más tostado.

Incorpora el azúcar y deja que se haga un caramelo a fuego lento, utiliza una lengua de silicona para mover, si utilizas una de madera se te quedará el caramelo pegado. Una vez que el caramelo empiece a ser dorado, vierte el preparado sobre una hoja de papel sulfurizado, procura alisar dejando una placa fina y uniforme y deja que se enfríe. Después tritura este crocante de sésamo a tu gusto, con trocito más o menos grandes.

Prepara la crema inglesa, puedes hacerla en Thermomix o en un cazo. Para hacer el proceso rápido en un cazo, pon todos los ingredientes en dicho recipiente a fuego lento y no dejes de mover con unas varillas hasta que la crema espese. Después déjala enfriar.

Mezcla la crema con 100 gramos de sésamo caramelizado y ponlo en un recipiente metálico con tapa hermética e introdúcelo en el congelador. Como siempre que haces un helado, cada hora aproximadamente sácalo para batirlo, consiguiendo así que se hagan menos cristales, que coja aire y quede un helado cremoso.

Cuando esté congelado disfrutarás de un exquisito helado casero, muy sabroso, que podrás servir en copa con una galleta, en cono, con un sirope de chocolate… Recuerda que si el helado pasa muchas horas en el congelador ya hecho, antes de servirlo deberás dejarlo a temperatura unos 5-10 minutos.