La situación económica en Grecia es muy complicada, los habitantes han sufrido todo tipo de recortes reduciendo considerablemente la calidad de vida, pero parece que se siguen adoptando nuevas medidas, algunas tan peculiares como la comercialización de alimentos caducados. Ahora las tiendas de comestibles del país heleno van a poder ofrecer aquellos alimentos que han superado la fecha de caducidad pero que todavía se pueden consumir a un precio mucho más asequible. El Gobierno del país ha decidido volver a activar una reglamentación que permitía esta práctica también en el resto de países europeos, algo que delata como está la situación y la incapacidad de frenar la continua escalada de precio de los alimentos considerados básicos. Sin embargo, en la actualidad, la reglamentación europea rechaza la venta de alimentos caducados, pero la mencionada regla existe.
En nuestro país podemos ver en algunos centros de distribución y supermercados, ofertas en productos que están próximos a rebasar la fecha de consumo preferente, pero son muy pocos los casos que hemos conocido en los que se ofrecen alimentos que han sobrepasado la fecha de caducidad. Se da vía libre a la comercialización de estos productos con las siguientes especificaciones, deben tener un coste de un tercio de su valor original, tienen que estar colocados en una estantería separada del resto de alimentos del centro y perfectamente identificada con un rótulo que indique Alimentos con Sostenibilidad Pasada. Con respecto al tiempo que pueden ser expuestos para la venta, una semana para los productos que muestre el día y mes de vencimiento, un mes para aquellos productos que la caducidad esté expresada en mes y año, y finalmente, tres meses para aquellos productos en el que la caducidad sólo se muestre con el año.
Medidas parecidas aunque no tan extremistas las hemos conocido en otras ocasiones, podemos citar por ejemplo que en el año 2009, el Gobierno de Canarias y Asuican (Asociación de Supermercados de Canarias) daban a conocer un proyecto para facilitar la alimentación a las familias más necesitadas, las que sufrían de forma más acusada la crisis económica. Se planteaba proporcionar alimentos que no están ni caducados ni en mal estado a los más necesitados, en ese caso eran alimentos que habían superado la fecha de consumo preferente. Como sabemos, el consumo preferente alude a lo que se considera fecha de consumo óptimo en el que los alimentos muestran sus mejores cualidades organolépticas, una vez superada esta fecha, empieza a rebajarse el grado de calidad pero en ningún caso quiere decir que no se pueda comer y se tenga que retirar y desechar, pero nada que ver con lo que ha puesto en marcha el Gobierno griego.
Esta regla no se aplica a todos los alimentos, sólo a los productos envasados, los perecederos están descartados, tampoco la podrán llevar a cabo los distribuidores, sólo el sector minorista. Como apunte hay que decir que estos alimentos no podrán ser adquiridos por restaurantes y demás establecimientos de hostelería, aunque deberían explicar cómo van a poder controlar y evitar que no lleguen los productos a estos establecimientos.
Por otro lado, la responsabilidad de la comercialización de los alimentos caducados será exclusiva del comercio, el vendedor es el responsable de que estos alimentos estén en perfectas condiciones higiénicas y no superen las fechas antes especificadas sobre el tiempo de comercialización, por lo que se puede decir que es una gran responsabilidad que no sabemos si el sector minorista decidirá asumir, el riesgo de toxiinfecciones alimentarias es muy elevado. Hemos buscado más información en diferentes publicaciones griegas, como por ejemplo este artículo de Nooz, pero en todos los casos, es una breve nota informativa, no dan muchos más detalles al respecto.
De la medida se han hecho eco algunas asociaciones de consumidores y organismos oficiales que la han criticado y posiblemente con toda la razón, curiosamente el Gobierno griego declara que no hay para tanto, pues lo mejor será que den ejemplo y consuman este tipo de alimentos. Las críticas se centran en la poca capacidad del Gobierno para controlar los precios y evitar que se hayan incrementado casi de forma especulativa, no se ha puesto control o freno alguno a los precios, agravando aún más la lamentable situación de grecia.
Personalmente creemos que nada tiene que ver esta medida con otras como la citada sobre el consumo preferente de los alimentos, tampoco se puede comparar con lo que hacen los Freegans, al respecto os recomendamos leer el post Freegan, término que hace alusión a aquella persona que recoge alimentos en la basura y que se pueden consumir porque están en buen estado o sólo han superado la fecha de consumo preferente, son alimentos recuperados con los que se pretende denunciar el despilfarro de comida que generan los centros de distribución y supermercados. No creemos que esta medida tenga una buena acogida por los consumidores con los bolsillos más deprimidos, se podría decir que ponen en juego la seguridad alimentaria y su propia vida.
En el artículo de ABC nos proporcionan algunas cifras sobre los incrementos de precio, en algunos casos es de un 15%, muy elevado teniendo en cuenta la situación que atraviesa el país. ¿Qué opináis sobre esta decisión?
